Un Enorme Jardín Japonés Tradicional

[2019-10-09]

Eran casi las 9 a.m. y yo atravesaba Yokohama hacia el sur. La siguiente ciudad de mi viaje quedaba bastante cerca (a menos de 25km), entonces planeé visitar un jardín japonés tradicional, que quedaba casi en el camino. Algo bueno, es que podía usar el ‘Grutto Pass’ para tener acceso sin costo (igual no es que fuera muy costoso, la entrada eran 700 yenes ~ $7usd).

Cuando llegué al jardín, me di cuenta de que el parqueadero de bicicletas quedaba un poco alejado de la entrada. Dudé por unos segundos, pero me sentía más tranquilo, estando lejos del centro de la ciudad donde pasaban miles de personas. Así que, parqueé mi bici, y solo tomé mi mochila, donde tenía mis documentos, dinero y cámara.

El jardín Sankeien

Mas sorprendente de lo que esperaba, increíblemente bello, y con muchos detalles para apreciar.

Lo primero que uno encuentra es un gran estanque; con muchos árboles y bellos edificios en el fondo. Al rededor, noté unas estructuras donde debían haber wisterias, pero no estaba en temporada de flores, tampoco de lotos ni de ninfeáceas; así que, los siguientes estanques pequeños debían de estar vacíos o con plantas secas. Decidí no tomar el camino principal, si no la dirección opuesta al rededor del gran estanque.

(Puedes revisar con anterioridad y escoger una buena semana para apreciar flores, y de pronto disfrutar alguno de los eventos del jardín. También puedes revisar aquí el sitio web)

Me encontré con dos gatos cerca de un pequeño santuario; uno de ellos era muy sociable, así que pasé unos minutos acariciándolo 😊. Después de eso, llegué a una bella vista de una pagoda de tres pisos sobre una colina. Supuse que la ruta por el jardín me llevaría luego hasta allá.

Sankeien Garden Pagoda
Buddhist Sanctum of Former Tokeiji Temple at Sankeien Garden
Main Hall of Former Tomyoji Temple at Sankeien Garden

Empecé a ver interesantes edificios históricos. No le estaba poniendo realmente atención al mapa, pero solo noté que el primero era un templo de hace 500 años, muy bien preservado. Me preguntaba si el templo estaba ya allí, antes de la creación de los jardines; estos no parecían ser tan antiguos.

Llegue a una antigua residencia familiar, y era impresionante solo desde afuera. Pero me emocioné al descubrir que podía entrar y explorarla (sin zapatos, claro).

Un señor muy gentil me preguntó de donde venia, y se sorprendió con mi respuesta; me dijo que yo era el primer colombiano que conocía y que realmente le gustaba nuestro café y también que en mi país había mujeres muy hermosas. Se siente muy bien escuchar cosas buenas por la que tu país es conocido.

El señor me entregó un folleto en español sobre la casa para que pudiera comprender su historia y todas las áreas que la conformaban. Eso fue también inesperado; siempre me sorprendía ver información en inglés fuera de las áreas más turísticas – eso ya era difícil.

Shirakawago
“Shirakawago” por Jordy Meow, licenciada mediante CC BY-SA 3.0

Leí que era una residencia de estilo ‘Gashoo’ (como la famosa Villa Shirakawa-go en Gifu). Para mi sorpresa, esta casa pertenecía originalmente a otra villa contigua y había sido reubicada en 1960. También, leí que las construcciones históricas de alrededor habían sido reubicadas de diferentes partes del país,incluyendo la pagoda.

Dentro de la casa había una exhibición de implementos de agricultura de la región original, incluyendo un ‘Irori’: un tipo de chimenea sumergida tradicional de Japón, usada para calentar el hogar y cocinar.

También fue increíble subir al segundo piso. Me encontré con una galería de elementos históricos; estaba bastante oscuro, así que era difícil tomar buenas fotos, pero todo era fascinante. Había demasiados elementos, herramientas, cerámicas, y antiguos kimonos.

Se sentía muy pacifico caminar entre las casas, templos y la diversidad de árboles. También, había muy poca gente, así que era perfecto.

Continué hacia la colina, para visitar la pagoda de 500 años, preguntándome como lograron transferirla hace 100 años desde la Prefectura de Kioto (alrededor de 500km de distancia).

Más adelante en el camino, terminé en una plataforma de observación, con un área de descanso donde compré algo de comer, y desde allí se podía apreciar una inmensa refinería, detrás del jardín, justo al lado del mar.

Eneos Negishi Refinery

Al bajar de la colina por el lado contrario, llegué a la entrada de los Jardines Interiores; originalmente eran jardines privados de la familia del fundador. Hermosas casas tradicionales -muchas también reubicadas de diferentes regiones. Una de ellas, se dice que, fue construida en 1603 por Tokugawa Ieyasu, el primer Shogun del Shogunato Tokugawa.

Estos Jardines Interiores eran el área más popular; y se podía entender con tanta belleza. Pero realmente disfrute más tranquilo mi tiempo en los Jardines Exteriores.

De igual manera, recomiendo visitar y explorar el Jardín Sankeien. Preferiblemente con bastante tiempo porque hay mucho que apreciar.

Después de dos horas de recorrido, me preparé para partir; quería llegar con tiempo suficiente a la siguiente ciudad para visitar algunos templos, y lograr encontrar el lugar para pasar la noche antes de que el sol se ocultara.


No dudes en escribirme cualquier pregunta abajo en los comentarios.


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