Justo Cuando Pensé Que No Podía Estar Peor – Pero Descubrí Algo Que Me Salvó

[2019-10-10]

Riviera Zushi Marina from Osaki Park

Después de una tranquila noche en un oscuro parque de Zushi, desperté bastante temprano, preocupado por el posible tifón que se acercaba. Empecé a revisar las noticias y le escribí a mi amigo, pero aún era muy pronto.

Empaqué todas mis cosas y me fui por desayuno. Entonces recibí la mala noticia: El tifón venia directamente hacia mi (el trayecto previsto atravesaba el área donde yo planeaba estar los siguientes días), y lo catalogaban como ‘el peor tifón del siglo’: un huracán categoría 5 (como Katrina en 2005).

Typhoon Hagibis captured by Japan Meteorological Agency

No sabía que hacer; no estaba preparado para eso. Pensaba que la temporada de tifones era solo entre julio y septiembre, así que no esperaba nada parecido.

Comía en un Konbini mientras investigaba y planeaba que hacer. Por lo menos, tenía todavía dos días más antes de que llegara el tifón; la mala noticia era que se pronosticaba lluvia continua a partir de las 5 p.m. de ese mismo día. Así que tenía que decidirme rápido y empezar a avanzar.

Había leído acerca de unos lugares que estaban por todo Japón, llamados Michi no Eki (Lit. Estación de Camino). Podían servir de último recurso para pasar la noche al viajar. Cada uno tenía un área de descanso, con baños y máquinas expendedoras. (Puedes leer más sobre ellos, aqui).

Mount Hakone - Google Earth

Mi plan original para esos días era dormir en un sitio de camping en la playa de Oiso (un pequeño pueblo en el área de Shonan). Desde allí, subiría al Monte Hakone – Un complejo volcánico con una enorme caldera, donde se encuentra un lago (Lago Ashi) con varios lugares de camping a su alrededor.

Encontré en Google Maps un Michi no Eki al lado del lago; podría quedarme en el área de descanso de la estación, en lugar de acampar.

Para llegar hasta el lago, tenía que ascender como 800 metros. Si no hubiera tifón, podría haberlo subido con calma, probablemente tomándome todo el día. Pero no había tiempo. Aparte, para llegar solo hasta el inicio de la subida, tenía que pedalear entre 3 y 4 horas desde donde me encontraba. La lluvia me podría coger en medio de la subida, aparte de la noche. Era una antigua ruta rural, y probablemente terminaría en completa oscuridad.

Busqué otros Michi no Eki con Google Maps, y resultaron tres más por el área. El más fácil de llegar era Yamakita (Lit. Montaña del Norte). Por supuesto, sabía que igual me tocaba ascender una montaña.

Aunque estar medio de montañas era un descanso, porque el tifón no se sentiría tan fuerte como en la costa.

Map of Michi no Eki near Mount Hakone

Esa mañana avancé tan rápido como pude a través de las planas y rectas avenidas de la costa de Shonan.

Era un día soleado; alcanzaba a divisar el hermoso mar, pero solo quería llegar a tiempo.

En esas carreteras también vi pasar bastantes ciclistas, todos con equipo profesional.

Oita City Manhole Cover

En el camino, encontré otra tapa de alcantarilla personalizada (como la que vi en Yokohama). Así que, me detuve por unos segundos y tomé la foto sin bajarme de la bici. Mantenía la cámara en la canasta frontal para fácil acceso).

El día anterior, había revisado las calles de Kamakura, pero no encontré ninguna otra tapa personalizada. Esta era de la ciudad de Oita, pero creo que su diseño podría funcionar para cualquiera de los lugares que había atravesado, llenos de impresionantes vistas.

Pasadas dos horas y media, llegué a la playa donde pretendía acampar inicialmente. Era muy bonita; hubiera sido una experiencia fascinante.

Andaba bastante triste por no haber podido explorar Kamakura ni toda esa gran área.

De allí en adelante, me desvié hacia el norte, dejando atrás el mar.

Ya eran las 11 a.m., así que busqué algún lugar para almorzar antes de irme hacia las montañas. En el mapa vi un montón de restaurantes cerca de una estación de tren (Estación Kozu), que quedaba justo en mi camino.

Un problema de viajar por Japón es que muchos restaurantes solo abren a horas especificas; por ejemplo, los que estaban cerca a esa estación, abrían a medio día, así que tenía que esperar toda una hora.

encontré un lugar para sentarme un rato. Y, de repente, una bullosa sirena de alerta empezó a sonar por altavoces. Fue muy angustiante. La voz de una mujer también se escuchó, pero no le pude entender nada aparte de ‘Taifu’ (Tifón en japones).

Miré en dirección al mar. El día soleado se había convertido en un cielo oscuro y terrorífico. Solo pensé: “aquí fue”.

Me alarmé y empaque todo de nuevo. Salí de allí lo más rápido posible. Ignorando mi hambre, pedaleé por mi vida.

Mas adelante en el camino, paré en un Konbini para comer algo rápido.

Al dejar el área urbana, empecé a notar el hermoso verde del campo.

Mount Fuji From Kaisei Town

En un instante, noté el Monte Fuji a la distancia. La sensación fue increíble. Aun, con todo lo que pasaba, me sentía afortunado de estar en ese viaje. Era todo un sueño ver el Fuji “tan cerca”. Se veía enorme.

Las montañas estaban llenas de bosques – parecía que podía encontrar ‘Totoros’ en cualquier lugar. Estaba embobado, aunque al mismo tiempo, preocupado por la lluvia que venía. No sabía que me esperaba adelante o si llegaría a la estación con mi ropa aún seca.

Mountains in the Road to Yamakita
Mountains in the Road to Yamakita

Cuatro horas más tarde, llegué a la Michi no Eki ‘Yamakita’ antes de que empezara a llover. Aunque si estaba empapado de sudor – había recorrido más de 60km sin parar mucho, y casi la mitad había sido solo subiendo montañas.

Dejé la bici bajo un techo y me puse a explorar. El lugar era bastante pequeño, pero se veía confortable. Tenía un pequeño mercado y un área de descanso de no más de diez metros cuadrados. Pero podría quedarme adentro, protegido de la lluvia y con acceso a baños.

Compre unos pasabocas para la noche en el mercado. El área de descanso tenía máquinas expendedoras, pero solo de bebidas.

Empezó a llover un par de horas después de haber llegado (el pronóstico fue bastante acertado). Me encontraba seguro, pero no había nada para hacer. Quedarme en ese reducido espacio durante tres días hasta que el tifón pasara, era un panorama bastante tedioso.

Revisé en Google Maps, y una Michi no Eki más grande y atractiva (Fujioyama) se encontraba a solo 11.4km de distancia. Esperaba poder cambiarme. Intentaría moverme en la mañana si la lluvia paraba en algún momento.

Map from Michi no Eki Yamakita to Fujioyama

No dudes en escribirme cualquier pregunta abajo en los comentarios.


Comments

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *